El colectivo murciano aVer celebra su fecundo primer aniversario con numerosos proyectos en la mochila
¿Una comuna en pleno siglo XXI? Algo así, pero sustituyendo la vida contemplativa y abandonada de esos hippies de los sesenta y setenta por un torbellino de ideas y proyectos. El trabajo es el fin, pero cuando pasión y deber coinciden, ¿dónde está el problema? Son el colectivo aVer, activistas de la fotografía, agitadores de la calle. Juanan Requena, Sergio Nicolás, Selu Herráiz y Marga Garrido comparten casa-laboratorio (próximamente, casa-laboratorio-sala de exposiciones), mientras que Mónica Lozano, ‘La Mami’, ejerce de vital apoyo en el exterior.
‘Armarla’ o ‘interactuar’ son términos que aparecen constantemente al hablar con el colectivo sobre sus fines y objetivos. Una revolución inquieta pero pacífica, sin otro propósito que llevar el arte y la creatividad a la calle, a las aceras. Hace trece meses ningún miembro de aVer –a excepción de Mónica, profesora de la Escuela de Bellas Artes– tenía contacto con la fotografía, pero en este tiempo no sólo han tomado contacto con su técnica, sino que han realizado numerosos e interesantes proyectos.
Todo comenzó con Juanan y Sergio, que en el curso 2005/ 2006 comenzaron a cursar el entonces recién nacido ciclo de Fotografía Artística de la Escuela de Bellas Artes. Allí elaboraron un proyecto, que atrajo a una de sus profesoras, Mónica, quien se lo hizo llegar a Paco Salinas, director de Fotoencuentros. A éste también le gustó, y en esa misma edición del festival murciano de fotografía se llevaba a cabo la idea.
El proyecto, ‘Refoto’, se basaba en la célebre iniciativa ‘Bookcrossing’, una red internacional de libros, registrados con su código particular en Internet, que aparecen ‘abandonados’ en cualquier espacio público y que uno puede tomar prestado, entrando a formar parte de esa cadena y dejando constancia en la web.
El trabajo de aVer no tuvo a Internet como aliado, pero fue igualmente interesante: sobres vacíos en las galerías y salas de exposiciones de Murcia y Cartagena durante Fotoencuentros, con instrucciones dentro de ellos. El primer ‘receptor’ debía hacer la foto que quisiera e introducirla numerada en el sobre. El segundo, tenía que tomar una nueva foto en la que apareciera la primera, y así sucesivamente. El resultado se expuso en un bar de Murcia, y próximamente podrá volver a verse en la casa del colectivo.
Proyectos y colaboraciones
La última actividad desarrollada por aVer ha sido el ‘Proyecto Hola!’, celebrado hace diez días de mano del Foro Artístico (FA) y enmarcado en el festival ‘Alter-Arte’. El taller gratuito buscaba iniciar a la fotografía alternativa y al formato ‘polaroid’, con los participantes tomando las calles de Murcia.
Entremedias, proyectos como ‘Cartagenians’, realizado durante el pasado festival cartagenero Mucho Más Mayo, con el que el centro de esa ciudad amaneció repleto de grandes fotografías. “La mayoría tenían que ver con momentos callejeros: un portero esperando, alguien que compra el periódico, un perro espiando, una persona con el carrito de la compra… Las hicimos a tamaño real o mayores, algunas desfiguradas y otras no”, explican.
Otra actividad fue el ‘Ob-ser-vatorio’, realizado en el Festival de Fotografía de Almansa, y que ya hicieron en San Javier en el festival ‘Imagina’. En él, ocultos o al descubierto, los activistas hacen fotografías de los transeúntes que instantáneamente pueden contemplarse en Internet, en un ‘blog’ creado al efecto y que continúa colgado en la red tras el evento.
A estos proyectos específicos hay que sumar la organización de las I Jornadas Regionales de Cultura Electrónica y su colaboración con entidades como el Centro Párraga, La Fragua, FA, Murcia Underground, Mundaka y Teatro Atroz.
Entre las ideas del colectivo en la recámara, nuevas versiones de algunos de los trabajos realizados hasta ahora –así, llevar la idea de ‘Cartagenians’ a las calles de Murcia o repetir el Ob-ser-vatorio, esta vez en el Mercado de Almansa y proyectando las fotografías en una pared del recinto–, pero también otros nuevos, como ‘Graffiti’, en el que se proyectan una fotos y un tipo las pinta en la pared en forma de graffiti, con ambientación musical.
Acuda a la casa-taller del colectivo aVer, ‘El Alambique’
Cuatro de los miembros del colectivo aVer, Juanan, Sergio, Marga y Selu –todos menos Mónica, ‘La Mami’– comparten piso. De esta forma, hogar y lugar de trabajo coinciden para estos jóvenes, que han instalado un laboratorio de fotografía en la casa. Pero la cosa va más allá: aVer va a convertir parte del apartamento en una sala de exposiciones abierta al público. La idea es mostrar su trabajo y el de otros artistas que empiezan, así como crear un punto de encuentro entre los creadores de la ciudad; un caldo de cultivo para las ideas y proyectos. El resultado, al que han bautizado ‘El Alambique’ (c./ Eulogio Soriano, 9, 2ºA. Murcia) “está basado en lo que se hace en Londres, donde la gente realiza exposiciones en su casa abiertas al público o convierte sus casas en una obra de arte y las abre al público”. En el último año, aVer ha invertido sus ahorros en el laboratorio analógico y digital de blanco y negro, cámaras de fotos, ordenadores, libros… “Lo bueno es que en cualquier momento podemos ir al laboratorio, prestarnos material o pedirnos consejo”, explican.