«Que te elijan entre las cien mejores fotógrafas del mundo es increíble»

Empezó inmortalizando las vacaciones familiares con la Yashica de su padre. Fotógrafa, periodista y empresaria, esta donostiarra afincada en Pamplona acaba de recibir un prestigioso galardón de fotografía en Estados Unidos ELISA LÓPEZ/
«Que te elijan entre las cien mejores fotógrafas del mundo es increíble»
Koro Cantabrana con la fotografía realizada en Ceuta que le ha valido el reconocimiento de la Women In Photography.

{mosimage}Donostiarra de 40 años y afincada en Pamplona, casada y madre de dos niños.Estudió Periodismo, vivió en Brasil y en Los Ángeles, donde ejerció de reportera. A su regreso fue profesora en la Universidad de Navarra y trabajó en Efe. Hoy es empresaria.

Lleva la fotografía en la sangre, una pasión heredada de su padre. La instantánea de uno de sus últimos trabajos fotográficos, en Ceuta, le ha llevado a ganar uno de los premios internacionales más prestigiosos.

– ¿Esperaba un reconocimiento así?– En absoluto. Había oído hablar del Women In Photography International, y una amiga fotógrafa que vive en Los Ángeles y conocía mis últimos trabajos me dijo que tenía muchas posibilidades de ser seleccionada. Pero yo no lo tenía nada claro.

– Y le convenció.

– Pues sí. Y decidí presentar una fotografía tomada a principios de este año en el paso fronterizo del Biutz, en Ceuta, que refleja la desesperación de una mujer marroquí al ver cómo la Policía requisa las mercancías de quienes pasan al otro lado de la frontera. La envié sin ninguna esperanza y al mes me llamaron para decirme que estaba seleccionada.

– ¿En qué consiste el premio?

– La Women In Photography es una prestigiosa organización americana sin ánimo de lucro que trabaja con mujeres. El premio no es económico, se trata de ser seleccionada para participar en una exposición. Y que te elijan entre las cien mejores fotógrafas del mundo es increíble. Además, las seleccionadas suelen ser americanas y yo soy la única española junto a otras cinco europeas.

– ¿Pensaba en algo así cuando soñaba con ser periodista?

– De niña soñaba con ser periodista para viajar. Y eso se cumplió. Terminé la carrera y me marché algún tiempo a Brasil para trabajar en la sección de fotografía de un periódico. Después viví cuatro años en Los Ángeles y entonces me empezaron a interesar los temas sociales. Hice reportajes de pandillas urbanas, de latinos en EE UU, siempre con mi cámara a cuestas. Pero al final regresé a España para trabajar en la agencia Efe, hice portadas de disco para Fermin Muguruza y Barricada y también fui profesora en la Universidad de Navarra.

– Y empezó a investigar otros mundos.

– La vida va cambiando, me casé y tuve hijos y cada vez era más difícil conciliar la fotografía profesional con la familia. Hoy en día aún sigue siendo complicado para las mujeres combinar profesión y vida privada. El mundo de la empresa me interesaba y los temas sociales eran mi prioridad y entonces monté la empresa K-7, de innovación social y asesoría comercial.

– ¿Una ‘coaching’ social?

– No exactamente. Trabajo en innovación social, asesoro a gente que quiere montar su propia empresa, es una consultoría. Ahora estoy en un máster de Dirección de ONG, con la intención de asesorar y ayudar a estas asociaciones desde mis conocimientos comerciales.

– ¿Dónde queda la fotografía?

– Profesionalmente la dejé hace tiempo. Ahora me queda la afición, o mejor, la pasión, que no puedo abandonarla. Es parte de mi vida.

– ¿Se ve la vida de otra manera a través de un objetivo?

– A través de un objetivo cada uno ve su propia realidad. La cultura y las costumbres hacen que cada persona vea un mundo distinto. En muchas ocasiones he fotografiado las mismas cosas que otros compañeros y el resultado es completamente distinto. Mirar la vida a través de un objetivo te ayuda a entenderla.

– ¿Qué es lo próximo que le gustaría retratar?

– A finales de año viajaré a Melilla a completar el reportaje fotográfico que empecé en Ceuta sobre la inmigración.